NAPCA no es un proveedor de salud. Estas recomendaciones se han recopilado en base a las recientes pautas e información ofrecidas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades por parte de la Administration for Community Living. Para más información, por favor visite la página de internet CDC.gov o la página de internet de NAPCA la cual incluye información adicional específica de cada estado.

Prevención
Se cree que el nuevo coronavirus, también conocido como COVID-19, se propaga mayormente de persona a persona en contacto cercano a través de gotitas respiratorias de la tos y los estornudos. El virus también se puede transmitir cuando uno se toca la boca, la nariz o los ojos después de tocar alguna superficie u objeto con el virus. Existen varias maneras de protegerse a sí mismo, a su familia y a su comunidad del virus.
La manera más efectiva es lavarse seguido las manos con jabón y agua por lo menos 20 segundos, especialmente después de haber estado en un lugar público o después de sonarse la nariz, de toser o de estornudar.
Es importante evitar a las personas que podrían estar contagiadas y evitar lugares concurridos para protegerse a sí mismo y a otros. Quédese en casa si está enfermo (al menos que necesite atención médica), cúbrase la tos y los estornudos con un pañuelo o la parte interior del codo, también limpie y desinfecte con frecuencia las superficies de contacto común.
Para más información sobre la prevención del COVID-19, haga clic aquí.
Para más información sobre cómo se propaga el COVID-19, haga clic aquí.

Síntomas
El nuevo coronavirus, también conocido como COVID-19, puede presentar síntomas leves a graves, incluyendo: fiebre, tos y dificultad respiratoria. Los síntomas aparecen de 2 a 14 días después de la exposición al virus. No todas las personas con COVID-19 presentan síntomas, o estos pueden ser lo suficientemente leves para pasar desapercibidos, pero de cualquier manera estas personas todavía pueden ser contagiosas. Los adultos mayores y las personas que sufren de (padecen de) condiciones médicas crónicas se encuentran en mayor riesgo de contraer seriamente la enfermedad COVID-19 y de morir. Esto se debe a que el sistema inmunológico se debilita al envejecer, lo cual hace más difícil combatir las enfermedades contagiosas.
Si presenta síntomas del virus, comuníquese con su proveedor de salud e infórmele de sus síntomas, su exposición al virus y cualquier condición de salud preexistente. Su médico decidirá si necesita hacerse la prueba de acuerdo a la información que usted comparta.
Para diagnosticar un posible caso, los proveedores de salud podrían realizar pruebas para descartar la influenza u otras enfermedades comunes. En estos momentos, no todas las instalaciones sanitarias pueden realizar la prueba de detección del COVID-19 y actualmente no existe ningún tratamiento para el virus.
Para más información sobre los síntomas del COVID-19 y las pruebas de detección, haga clic aquí.

Planificación
Existen pasos que usted puede tomar para prepararse a sí mismo y a su familia en caso de que el nuevo coronavirus, también conocido como COVID-19, se propague en su comunidad. El CDC recomienda crear un plan de acción para todos en el hogar que podría incluir una lista de contactos de emergencia, la planificación de cuidados de aquellos que podrían enfermarse y el acceso a varias semanas de provisiones, en caso de que necesite quedarse en casa por un largo periodo de tiempo.
Además, permanezca atento a las recomendaciones que los funcionarios locales de salud pública podrían compartir referente a su situación local. La manera en que usted responde ante el brote puede depender de su formación, la comunidad donde vive y las cosas que lo hacen diferente a otras personas. Puede fortalecer a su comunidad compartiendo información precisa sobre el virus, cuidándose para sobrellevar el estrés durante un brote y ayudando a los demás a hacer lo mismo.
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